CAPITULO 15: NAVIDAD ¿DULCE? NAVIDAD (9ª Parte)

De repente Bridget sintió una calida claustrofobia a su alrededor, el escudo protector apareció y asustada vio como los dos pálidos rodeaban al mago.

Harry procuraba mantener su espada a la izquierda y a la derecha intentando distinguir en que orden atacarían, controlando toda la situación y determinando las posiciones desde las que los adversarios lanzaban sus ataques, blandiendo su espada a un lado y a otro intentando reunir a los contrarios en una sola línea para atacar con mas fuerza sin permitir un momento de descanso.

Parecía que ninguno ganaba terreno sobre los otros, Harry intentaba encontrar los puntos débiles de sus atacantes y consiguió asestarle un golpe único a Bud Lote, dejándolo KO durante un buen rato pero Hachan era imbatible, era un guerrero de raza, demasiado temerario en sus movimientos como para bajar la guardia. Quería girarse y preocuparse por Bridget y que seguía a salvo dentro del escudo y en un descuido, La Vey le propino un corte profundo en el brazo derecho y con un gélido rictus le cruzo la cara provocando que la sangre brotara sin control derramándose bajo sus pies.

De rodillas, débil y prácticamente ciego, Harry saco sus ultimas fuerzas y empuño su espada de la resistencia hacia la oscura armadura de Hachan que con sorna y desden apartó hacia un lado, dejandola caer sin oposición, para encajar el golpe final en el pecho del joven mago. La espada de la muerte penetro profundamente rozando el corazón de su adversario que sin parpadear exhalo la poca vida que le quedaba.

Mirando al cielo, el esbirro de Saumort sacó con furia la espada del cuerpo inerte, lamió toda la sangre hasta el filo y cogiendo a Bud lote por un brazo lo arrastro con él mientras se alejaba y desaparecía en las tormentas de arena que parecían disiparse.

De nuevo la oscuridad, sin estrellas, sin luna, sin mundos…El escudo protector de Bridget desapareció y sin poder gritar se arrastro como si no fuera real a recoger en sus brazos el cuerpo de su amado. Grito en silencio, una y otra vez, de rabia, de amargura, de odio, de…venganza. Agarraba el cuerpo de Harry con tanta fuerza y dolor que dejo marcada sus uñas. Comenzó a no poder respirar, apenas parpadeo un par de segundos y cayó desmayada al suelo.